El conjunto cubano arrancó con el pie derecho sus andadas por el preclasificatorio a la FIBA AmeriCup 2023 en Nicaragua. Los antillanos vencieron a Islas Vírgenes en un cerrado duelo donde los nuestros no convencieron del todo.
Inconsistencia ofensiva, pérdidas de balón y resguardarse en figuras individuales fueron las pautas que marcaron el juego de Cuba. Los Tankes del Caribe sufrieron la figura de Iván Haska durante todo el encuentro, quién les enchufó 20 puntos de los 63 que anotaron los derrotados.
Cuba para llevarse la victoria 72-63 se resguardó en la figura de Jasiel Rivero y en una potente defensa que salvó en más de una ocasión las castañas del fuego. Pues los nuestros tiraron de lágrimas desde la línea de libres, un paupérrimo porcentaje de 39.3%, algo inverosímil hoy en día. Además, horrible también desde larga distancia franqueando para un 18.5%.
Mucho tendrá que mejorar ofensivamente el conjunto cubano si quiere lograr algo en los venideros Juegos Centroamericanos. Ciertamente el rendimiento defensivo de la escuadra tuvo méritos, pero habría que ver si pueden contrastar esas pautas en ataque.
Por otro lado, en la otra zona eliminatoria, el cubano nacionalizado ecuatoriano Adriano Barrera le encestó 18 unidades a Chile, pero no pudo evitar la caída de su selección. Los sudamericanos despacharon 85-63 al combinado de Barrera para hacer valer su favoritismo.