La Selección de Fútbol cubano remontó en par de ocasiones frente a Trinidad Tobago, pero no logró el objetivo planteado antes del choque. Sin los tres puntos en la cancha Antonio Maceo de Santiago de Cuba aún no se certifica la permanencia en la División A de la Liga de Naciones de CONCACAF.
El duelo puede considerarse como el mejor en la era Yunielys Castillo para el fútbol cubano pues más allá de estar dos veces por detrás en la pizarra, se generaron varias opciones claras para haber tomado ventaja. En los anteriores choques de los Leones del Caribe fue notable la escases en ataque.
No obstante, quien vio las acciones a lo largo del primer minuto de juego imaginó lo peor al ver el balón en las manos de Raiko Arozarena. Los trinitarios no tardaron en amenazar el arco de los cubanos, pero esto representó un espejismo. La Selección Nacional apretó de forma rápida en campo rival.
En los botines de Karel Espino y de Yasniel Matos estuvieron los remates locales antes del minuto cinco para asustar a los visitantes. Claro, en el fútbol cubano la felicidad casi siempre es a medias y los Soca Warrios se colocaron por delante en jugada a balón parado.
Este es uno de los aspectos a corregir año tras año en el más universal de los antillanos. Con cierta displicencia en el marcaje, uno de los tres centrales de Trinidad Tobago registró el 0-1. Sheldon Beteau, jugador del SK Beveren de la segunda categoría belga silenció las gradas de la Antonio Maceo.
Quizás este tanto permitió a los presentes en el estadio y a quienes disfrutaban del partido a través de la televisión nacional ver a un elenco más propositivo desde ese momento. Cuba se acercó al área rival con mucho peligro, aunque también con poca puntería.
Con el paso de los minutos lo justo era la igualdad, pero la madera lo evitó a remate de Dairon Reyes en jugada individual. El capitán cubano Maikel Reyes estuvo desacertado en la primera mitad, siendo esto factor fundamental para no poder negociar el empate.
Antes del descanso se produjo la primera de varias lesiones para ambos equipos. Daniel Díaz entró por Alejandro Delgado casi cuando sonaba el pitazo final. Fueron 14 tiros totales de la Selección Cubana, pero apenas tres entre los palos trinitarios.
Para el fútbol cubano otra cuestión perjudicial es la falta de pegada. Ahora, donde hay desquite no hay agravio y Maikel Reyes celebró un gol de bella factura para el merecido 1-1. Quedaba casi media hora por delante y los cubanos manejaban los hilos del choque.
Poco tiempo pasó entre el 64 y 70, justo cuando Joevin Jones volvió a darle ventaja a los Soca Warriors. El futbolista del Police FC de Ruanda aprovechó las libertades defensivas de los locales para chutar de media distancia. Le dejaron sin marca y no perdonó.
Claro, el 1-2 no resultaba justo visto lo ocurrido encima del rectángulo verde. Tras varios cambios en los dos elencos y un juego muy cortado, el sustituto Aniel Casanova hizo válida una acción de Maikel dentro del área para la paridad definitiva. Luego de recoger un balón rechazado por el poste subió el 2-2.
Fútbol Cubano en la lucha por permanecer en la liga de Naciones
De esta manera todo se va a resolver en casa de los trinitarios el venidero 14 de octubre. En estos momentos con tres partidos desarrollados aparecen Honduras (6PTS), los representantes del fútbol cubano (3PTS), Trinidad Tobago (2PTS) y Guayana Francesa (1PTS). Jamaica y Nicaragua acumulan cuatro unidades a falta del encuentro entre ambos.
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