Despertar a un gigante dormido. Ese será el objetivo de Marcelo Bielsa, el entrenador argentino de 67 años que este miércoles fue presentado como nuevo entrenador de la selección uruguaya de fútbol, un mes antes de su debut ante sus pares de Nicaragua y Cuba.
Bielsa fue presentado en el mítico Estadio Centenario, que fue sede de la primera final de una Copa del Mundo en 1930, en una conferencia de prensa de la que participó All in 1 Deportes y que tuvo al rosarino conversando con decenas de periodistas durante más de una hora, algo poco usual para él, que desde hace décadas no da notas exclusivas.
El DT, que se hará cargo de una selección por tercera vez en su carrera luego de pasar por Argentina (1998-2004) y Chile (2007-2011), dijo que antes de resolver qué hará en cuanto a la lista de convocados para los amistosos, tendrá una charla con referentes históricos de Uruguay como Luis Suárez o Edinson Cavani para resolver si continúan o no en el combinado celeste. Ambos delanteros tienen 36 años y se aproximan al final de sus carreras. Es poco probable que lleguen a la Copa del Mundo de EE.UU., México y Canadá de 2026 pero sí podrían llegar a la Copa América de 2024.
Al ser consultado sobre si cree que Uruguay puede volver a ser campeón del mundo, Bielsa sostuvo que hay países que tienen ilusión y otros que tienen “toma de conciencia”. “Hay países que si toman conciencia de su poderío, de su potencial, tienen menos posibilidades de construir a través de la ilusión. Hay otros países que la toma de conciencia los autoriza a pensar en lo máximo y no es una ilusión, sino una realidad . Y hay países que combinan las dos cosas, que tienen recursos, antecedentes y que a esos recursos y esos antecedentes los potencian la fantasía, la ilusión, la perspectiva. Yo creo que Uruguay es de ese grupo del medio, puede fantasear y tiene con qué alimentar esa fantasía”, proyectó.
Uruguay es, junto a Argentina, el máximo ganador de la Copa América, con 15 títulos. A esto se le suman 4 títulos mundiales reconocidos por la FIFA, que se dividen en dos Copas del Mundo (1930 y 1950) y dos Juegos Olímpicos (1924 y 1928) en los que el torneo de selecciones de fútbol no fue organizado por el Comité Olímpico Internacional, sino por la federación que regula el deporte rey.
El inicio de la etapa de Bielsa como entrenador será el 14 de junio en el Estadio Centenario de Montevideo, ante la Nicaragua de Marco Figueroa. Seis días después, el 20, también jugará en el Centenario, pero frente a Cuba, de Pablo Elier Sanchez. Los encuentros servirán de preparación a los tres, ya que para Uruguay serán los únicos encuentros preparatorios antes del inicio de las Eliminatorias de Conmebol en septiembre, mientras que las selecciones centroamericanas se están preparando para disputar la Copa Oro.
Un bus por Montevideo
«Los entrenadores, los periodistas y los dirigentes somos lo peor del fútbol», sostuvo el entrenador entre las risas de los más de 300 periodistas que asistieron a su presentación. Según Bielsa, estos tres actores del deporte hacen «todo lo posible» para que el fútbol «sea cada vez peor» para quienes él entiende que son los verdaderos protagonistas de este evento: los hinchas y los jugadores.
Y fue justamente gracias a los jugadores y los hinchas que tomara las riendas de Uruguay. Bielsa contó que estos fueron los dos factores principales de su decisión, ya que le gusta mucho “el grupo de jugadores que ha representado a Uruguay en estos años” y que un viaje en bus por Montevideo lo enamoró del pueblo uruguayo.
¿Habrá comprado boleto de una hora? Loco Bielsa esperando, en el aeropuerto, para tomarse el ómnibus y volver a Montevideo. pic.twitter.com/d8xLuwe1vt
— Martin Charquero (@MartinCharquero) November 10, 2022
El rosarino contó: «Cuando estaba sin trabajo, vine a pasar un fin de semana en Montevideo con mi esposa. Nos fuimos quedando y nos quedamos por dos meses. Un día le propuse a mi esposa pasar el día en Carrasco (un barrio de clase alta en el este de Montevideo) y volvimos en transporte público, cuando se termina el domingo, se asoma el lunes y el mal humor de que termine la recreación y vuelva el trabajo se avecina”.
Bielsa continuó su relato: «El bus estaba repleto y se produjeron un montón de episodios que pusieron a prueba la civilidad de los que iban arriba. Nuestras conclusiones fueron de admiración por la generosidad con que la gente interactuó en ese viaje, amontonados, incómodos, y por generosidad me refiero al respeto por los niños, los mayores, las mujeres. (…) Esos dos extremos, los jugadores y la estatura del ciudadano, que finalmente es el destinatario de lo que los jugadores hacen, fueron dos elementos de mucho peso» para elegir a Uruguay, concluyó Bielsa.