Los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023 dejaron un muy mal sabor en la boca de los aficionados del baloncesto cubano. En ambos sexos, los resultados quedaron distantes de lo que se esperaba, pero creo que lo más doloroso para algunos fue la pésima demostración del conjunto masculino del cual traeré una historia que muy pocos conocen.
Previo al torneo multideportivo, el conjunto nacional, dirigido en aquel entonces por Eduardo Moya, venía de caer en el Preclasificatorio de la Americup en Nicaragua ante el conjunto local en un encuentro histórico para los Nicas. Las deficiencias mostradas por el elenco antillano fueron extremadamente marcadas y criticadas por varios entendidos en el tema. Fue por ese entonces que apareció en la escena una mano amiga que con todas las buenas intenciones del mundo quiso acercarse a la dirección técnica de Cuba para brindarles apoyo.
Mario Casamajor, miembro del staff técnico de los Miami Heat y de las Selecciones menores de los Estados Unidos bucaba la manera de poder ayudar a Cuba luego de lo visto en este torneo para mejorar el conjunto que iba a los Juegos Centroamericanos. Una amistad en común que tenemos ambos en el mundo de las cestas, me comunicó la intención que tenía Mario de conversar con el colectivo técnico de Cuba. Al saber de quién se trataba, sin vacilar, le envié el número telefónico del Sr. Eduardo Moya.
No sé si fue mi afán de ayudar de alguna manera lo que me impulsó, pues la verdad tenía claro que sería complicado que se recepcionara ideas externas. Lamentablemente, ya he perdido la cuenta de cuantos currículums de asesores y Coach de alto nivel que estaban dispuestos a impartir clínicas en Cuba y los mismos han sido ignorados.
Pero para culminar la historia en un caso simple, el resultado del contacto fue ¨dejarlo en visto¨. Quisiera abundar más en una trama que atrape a muchos, pero lo cierto es que no hay mucho más que argumentar. Ni tan siquiera una palabra salió en dicho chat y por supuesto, lo que sucedió después con el conjunto en San Salvador es historia.
Con este escrito no quiero decir que hubiera ganado la Selección Cubana de Baloncesto una presea en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, yo tan solo pretendo demostrar que lo que pasa en Cuba es más profundo. Creer que nos la sabemos todas, rechazar la ayuda externa porque pensamos que lo mejor es lo nuestro y hay que premiar a los del patio. En el mundo del deporte hoy en día estamos bien atrás y se puede apreciar casi en todos los deportes colectivos.
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8 comentarios
Ñoo candela
Tiene usted toda la razón, nuestros entrenadores están muy lejos del nivel mundial pero los directivos no pueden reconocer eso, además de la mala gestión al frente de las federaciones, ect
Alberto Rey nuestros entrenadores salen de Cuba y la mayoría son exitosos, con todo respeto.
Elio Javier Chavez Oviedo no creo, pero dígame cuales
Henry Morales Marquez por la cuenta qué me trae te entiendo. Pero no sé puede luchar contra molinos. Me quedó con él último párrafo de tú artículo
Mientras esten los dinosaurios caducos dirigiendo el deporte no habrá cambios.los q ponen ahí no tienen voto propio están regidos por la censura y la política y eso no es deporte es política destructiva del deporte nada q estamos jodimos cubanos estamos en caída libre
Están de lagrimas nuestros atletas profesionales en deportes colectivos
El nivel técnico de los entrenadores cubanos (los que residen en cuba)está en el piso en casi todos los deportes,creo que escapan la lucha,los de triple salto y uno o dos más