Dicen por ahí que lo importante en la vida no es cuantas veces te caes, si no cuantas veces eres capaz de levantarte. Ni las leyendas como Osvaldo Alonso están exentas de las caprichosas complejidades de la vida y las pruebas que estas te pone en el camino. Este fin de semana, luego de 14 meses fuera de las canchas, el mejor futbolista cubano de todos los tiempos regresó.
Una rotura del ligamento cruzado en la rodilla derecha en abril de 2022 durante un partido ante el DC United dejaba fuera a Osvaldo Alonso de toda actividad futbolística. Para todo jugador, una rotura de ligamento es, sin duda alguna, una de las lesiones más temidas y para un veterano, puede ser incluso el lapidario final de su carrera.
Pero Ozzie, que jugó futbol en canchas inhóspitas, que escapó en 2007 brincando cercas para ser libre, que superó miles de prejuicios en el futbol por su nacionalidad, este tipo de lesiones no le iba a poner fin a su carrera. Un guerrero de la vida innato como lo es Osvaldo Alonso comenzó el largo camino de recuperación que tejió una historia que finalmente se desencadenó este 4 de junio vistiendo la camiseta del filial del Atlanta United en la MLS Next pro.
Con el número 89 en su espalda y quizás con los mismos nervios que cuando era amateur, saltó a la cancha de cambio en el minuto 63 en sustitución de Karim Tmimi. El pinareño disputó 27 minutos encima de la cancha ante la sucursal del inter de Miami y su club le premió con senda goleada de 5-0 para celebrar el regreso de una de las leyendas de la MLS.
Su actuación durante el encuentro fue sin dudas haciendo lo que sabe. Como eje central y enlace de la defensa con la media cancha, Osvaldo repartió un total de 29 pases en 30 intentos con una astronómica efectividad del 97%. Además, 3 de esos 29 toques fueron largos y en busca de espacios en ataque, mostrando que las cualidades y la visión de fuego no han desaparecido.
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