El Instituto Nacional de Deportes, Eduación Física y Recreación de Cuba (INDER) acaba de hacer público en su perfil de Twitter la decisión de eliminar el requisito de repatriación para los atletas residentes en el exterior con la voluntad de representar a algún equipo en los eventos nacionales de las diferentes disciplinas.
«Concretados los pasos necesarios, informamos que la repatriación deja de ser una exigencia para que cubanos residentes en el exterior intervengan en los eventos nacionales organizados por el Inder», dice textualmente el tweet con el cambio de política aplicado por el ente que rige el deporte en la isla.
Esta era una medida exigida desde hace muchísimo tiempo por aficionados, especialistas y sobre todo atletas y entrenadores, muchos de los cuales se han visto imposibilitados de competir en su país por la absurda obligación de tener que repatriarse, algo que, por supuesto, no todos están dispuestos a hacer.
Concretados los pasos necesarios, informamos que la repatriación deja de ser una exigencia para que cubanos residentes en el exterior intervengan en los eventos nacionales organizados por #InderCuba. pic.twitter.com/iLdvvtGpTn
— INDER (@InderCuba) June 29, 2023
Por supuesto, de los casos más sonados últimamente sobre este asunto, es el de Yasmany Tomás y su voluntad denegada de jugar con Industriales, lo cual ha convertido al béisbol en el eje de estos debates, básicamente por tener la mayor cantidad de atletas con el propósito de volver a Cuba y por ser el deporte nacional.
Sin embargo, es menester aclarar que la eliminación de la repatriación como requisito indispensable beneficia notablemente a todos los deportes, y más aún a deportes colectivos que cuentan todavía con certámenes nacionales, dígase baloncesto, voleibol, etc, algunos de ellos con mejor o peor organización, pero eventos al fin y al cabo.
Esta medida debe también significar un antes y un después en las convocatorias de las selecciones nacionales y el llamado de atletas a representar a Cuba aunque residan en el exterior. Ojalá sea el primer paso de una apertura más amplia y valiente, que tanto necesita un deporte que pide a gritos contar con todos los talentos que ha formado para regresar a la élite.